En la actualidad, 85 niños viven felizmente en Shalom. Una media de cinco niños al año son acogidos en Shalom por múltiples razones. Estas incluyen el abuso físico y sexual en casa, la adicción de los padres a las drogas o el alcohol, la orfandad o el abandonamiento por razones de pobreza, género, discapacidad o enfermedad. Algunos de los niños han sido rescatados de la prostitución y de la explotación infantil.
Abandonamiento: Los niños nacidos de madres solteras son con frecuencia objeto de abandono brutal en Tanzania. Algunos se deshacen de ellos a un lado de la carretera, los entierran en la jungla o los tiran al vertedero. Los niños no deseados son los primeros en ser víctimas de las supersticiones rituales y abandonamientos.
VIH/SIDA: Sigue siendo una de las mayores amenazas en Tanzania, con más de 400 nuevas infecciones cada día. Debido al carácter epidémico del SIDA en Tanzania, el número de huérfanos en el país es abrumador.
Pobreza: Se estima que más de un tercio de los hogares sobrevive bajo el umbral de la pobreza con ingresos diarios inferiores a 1 USD, aumentando el riesgo de abandono de los niños.